La amplia riqueza y variedad de tipos de vinos tintos de nuestro país supone una auténtica puerta abierta a experimentar con sus sabores, aromas y matices. Una invitación que, más allá del disfruto propio y pleno del caldo, pasa por el maridaje de vinos como alianza perfecta para saborear la experiencia todavía más.
Y, a pesar de las apariencias, no: no es tarea menor elegir esa correcta combinación de alimentos con los distintos tipos de vino tinto.
Una labor para que la que, más allá de ponernos en manos de profesionales en el arte de la cata de vinos, podemos contar con algunas pautas básicas que nos ayudarán a triunfar en ese curioso matrimonio entre comida y vino. Unas guías que nos permitirán elaborar un maridaje de vinos tintos partiendo de un falso mito que es preciso romper: no es solo compañero de carnes, sino que el abanico de alimentos a los que puede acompañar es muchísimo más amplio.
Y, a pesar de que hay muchos matices a la hora de elegir un perfecto maridaje con vino tinto, hoy vamos a centrarnos en un factor que puede ser esclarecedor para ello: el tipo de uva con que esté elaborado un determinado vino.
CLASIFICACIÓN DE VINOS POR TIPOS DE UVA
Aunque conocer las uvas de los distintos tipos de vino tinto ayuda a orientarnos en el alimento ideal para acompañarlos, también es cierto que hay que tener en cuenta otro factor importante que no es otro que la maduración de un vino. Como es lógico, el tiempo de envejecimiento en barrica confiere a los vinos un carácter determinado que, también, repercute en sus cualidades de sabor y en sus aromas.
Motivo importante por el que, más allá de saber las características organolépticas de cada estilo de uva, conocer las diferencias entre un crianza, un reserva y un gran reserva nos permitirá acabar de acertar en un maridaje con vino tinto.
Tempranillo
Como ya hemos visto en anterioridad en otro post, la uva tempranillo es la estrella de los viñedos de La Rioja. Una uva noble enormemente rica en matices y aromas, que oscilan, según el tipo de suelo en el que crecen y el tiempo de maduración, desde los sutiles toques de cereza a otros más intensos como el tabaco, los frutos rojos o el café. Dada esta exuberancia de aromas, si contemplamos un vino con esta uva para un maridaje con vino tinto podemos plantearnos acompañarlo de una amplia variedad de platos: desde cualquier tipo de carne asada a pescados de río o pastas con salsas suaves, sin olvidar los tradicionales guisos, los embutidos o los quesos suaves.
Cavernet Sauvignon
Una de las uvas más populares en los tipos de vinos tintos de estilo bordelés. De sabor fuerte y perfume rotundo, algunos de los aromas que podemos encontrar en los caldos con protagonismo de esta uva son la grosella negra o, incluso, el chocolate. Dada la contundencia del sabor de estos vinos, para el maridaje necesitará platos a la altura de esta intensidad: carnes rojas, caza, platos con un toque amargo y quesos fuertes.
Garnacha
Dadas las características propias de este tipo de uva, su presencia en los distintos tipos de vinos tintos está acompañada de otras uvas con vistas a equilibrar su alta graduación alcohólica. Debido a esta personalidad, los vinos tintos con garnacha estarán perfectamente acompañados de platos de sabores rotundos como los quesos curados, cualquier tipo de carne, pescados de sabor intenso o, incluso, ensaladas en las que a los vegetales le acompañen carnes, quesos o, incluso, frutos secos.
Merlot
Otra de las uvas características de los tipos de vinos tintos de corte bordelés. Además de su alto contenido alcohólico, estos caldos destacan por sus sabores especiados y afrutados (entre los que se pueden reconocer frutos del bosque, pasas de uva e, incluso, toques de menta). Nuevamente y debido a esta contundencia, para maridar este tipo de vino tinto lo ideal es acompañarlos de quesos semicurados, caza, arroces o, incluso, guisos con carne o de legumbres.
Pinot Noir
Los perfumes afrutados de este tipo de uva (en los que se distinguen fresa, pomelo y frutos del bosque) se combinan con otros tonos florales y espaciados (como la vainilla). Una riqueza de matices que convierte a estos tipos de vinos de tintos en compañeros de sabores más delicados como pueden ser carnes blancas, pescados, hongos y setas, o quesos suaves.
Graciano
Una de las uvas que rezuma, en sí misma, el sabor de la Denominación de Origen Rioja. De maduración tardía, sus aromas son especialmente característicos por los tonos de ciruelas negras, regaliz o flores entre otros. Por esto mismo, las vinos con buena proporción de uva graciano maridarán a la maravilla con pescados poco grasos, carnes de cerdo ibérico, caza (especialmente, faisán y perdiz), verduras o pastas.
Distintos tipos de vinos tintos para diferentes maridajes. Una manera de sentir y experimentar con los sabores bocado a bocado y sorbo a sorbo como lo que son: una pareja perfecta, el maridaje de vinos tintos, para disfrutar todavía más de cada matiz que sienta nuestro paladar.