Si eres un amante de la tradición y la historia del vino entonces el porrón de vino no es un elemento que te resulte desconocido. Y es que este utensilio tan popular en la cultura española ha sido pieza fundamental en la degustación y cata del vino durante mucho tiempo. ¿No has tomado un trago de vino de un porrón? Pues sin duda, es una experiencia que deberías probar en algún momento, porque te va a sorprender.
A continuación te contamos todo sobre el porrón de vino, qué es exactamente, cómo surgió y te enseñaremos a utilizarlo de manera correcta. ¡Sigue leyendo para descubrirlo!
¿Qué es un porrón de vino?
Un porrón es una jarra de vino tradicional hecha de vidrio que se utiliza para degustar esta bebida. Tiene una forma distintiva que lo diferencia sustancialmente de cualquier otro utensilio relacionado con el mundo del vino. En este sentido, el porrón de vino está compuesto por un recipiente grande en la zona de la base, que es el que se utiliza para contener el vino y un largo y delgado pico que se curva hacia arriba, y que se emplea para trasladar el vino hasta la boca del catador.
Aunque hay diferentes tamaños de porrón, el más común suele tener una capacidad de 0,75 litros, igual que ocurre en el caso de las botellas de vino.
Pero, ¿por qué usar un porrón en lugar de una copa de vino normal? La respuesta está en la forma única y peculiar de este utensilio. Cuando levantas el porrón e inclinas el pico hacia tu cara, un fino chorro de vino se vierte directamente en tu boca. Esto no solo es algo divertido, sino que también permite que el vino entre en contacto con el oxígeno, lo que puede ayudar a liberar los sabores y aromas del vino y mejorar su degustación.
Origen del porrón de vino
El porrón de vino tiene sus raíces en la región de Cataluña, en el noreste de España. Aunque es difícil determinar exactamente cuándo se originó, su uso se ha extendido por toda España y es especialmente popular en las regiones de La Rioja, Aragón y Castilla.
Al igual que sucede con la bota de vino, el porrón de vino también era tradicionalmente utilizado en reuniones sociales y festivas. Tanto es así que es común verlo todavía en las fiestas de los distintos pueblos riojanos, como es el caso de Haro. Su diseño único hace que sea fácil de compartir entre varias personas, ya que se puede pasar de una persona a otra sin necesidad de utilizar vasos adicionales. De hecho, esta es una de las razones por las que el porrón de vino es tan popular en las fiestas: no solo es una forma práctica de servir vino, sino que también añade un elemento de diversión a la ocasión.
Cómo utilizar un porrón de vino
Usar un porrón de vino puede generar un poco de respeto para aquellos principiantes que se topan por primera vez con este recipiente, pero no se trata de algo complejo. Por ello, te animamos a que te lances a intentarlo sin miedo, ya que con un poco de práctica, pronto te convertirás en un todo experto.
Aquí tienes algunos trucos para usar un porrón de vino correctamente:
- Primero, llena el porrón con tu vino preferido, puedes elegir cualquiera de nuestros vinos de la Bodega Carlos Serres, si quieres además llevarte un buen sabor de boca y que la experiencia sea todavía más placentera. Eso sí, no llenes el porrón de vino completamente, sino que vierte en él alrededor de dos tercios de su capacidad.
- Luego, levanta el porrón con una mano (si te resulta demasiado pesado puedes emplear las dos) y coloca el pico cerca de tu boca. No lo toques con los labios; la idea es que el vino caiga directamente en tu boca sin necesidad de chupar el porrón.
- Inclina el porrón para que el vino empiece a fluir poco a poco intentando que no se caiga nada al suelo. Al principio, mantén el porrón cerca de tu boca hasta que te sientas cómodo con el flujo de vino.
- A medida que te sientas más cómodo, puedes empezar a levantar el porrón más alto, lo que aumentará la distancia entre el pico y tu boca. Esto no sólo es impresionante de ver, sino que también ayuda a airear el vino para que este se oxigene, lo que permite intensificar todos los matices del vino.
- Cuando hayas terminado de beber, baja lentamente el porrón para detener el flujo de vino antes de alejarlo de tu boca. Esto ayudará a prevenir cualquier derrame desordenado.
En resumen, el porrón de vino es mucho más que un simple utensilio para servir vino. Es una pieza de la historia y la cultura españolas, un símbolo de las fiestas, ferias y establecimientos hosteleros de nuestro país, y una forma divertida e interactiva de disfrutar del vino.
La próxima vez que tengas una reunión social o simplemente quieras disfrutar de una copa de vino de una manera nueva y emocionante, ¿por qué no probar un porrón?