Podemos encontrar muchos datos curiosos sobre la historia del vino. Como compañero que es de la historia del hombre, el vino cuenta con un buen número de anécdotas y curiosidades. Unas acuñadas durante los muchos siglos que hace que el vino forma parte de nuestra vida. Y es que no cabe duda de que no hay una bebida más antigua ni más íntimamente relacionada con cada una de nuestras páginas de vida como Humanidad.
Precisamente por esto, elegir solo diez curiosidades sobre la historia del vino resulta complicado. Una selección mínima si tenemos en cuenta que, 6.000 años antes de Cristo, ya había pueblos nómadas en Oriente Medio elaborando vino a partir de uvas silvestres.
Un hecho que no hace más que dar cuenta de hasta dónde tenemos que remontarnos para recopilar estos pequeños acontecimientos que no hacen más que poner su granito de arena en la construcción del mito y la historia del vino.
1. EXISTEN TRES DIOSES DEL VINO
Aunque el más sonado de todos es el Baco romano, lo cierto es que no es la única divinidad relacionada con el vino. Es más: este dios tan inmortalizado en el arte antiguo no es otra cosa que la adaptación que hizo el Imperio del dios griego del vino Dionisio. Sin embargo, incluso antes de esta deidad con dos nombres ya emitió un primer dios del vino.
Para conocerlo, tendríamos que remontarnos nada menos que al año 2700 a.C. y a un lugar tan singular como Sumeria, una región del sur de la Antigua Mesopotamia. En este territorio, ya se honraba a una diosa relacionada con el vino: Gestín. Un nombre cuya traducción significa «madre cepa». Curiosamente y a pesar de ser la única divinidad reconocida, hay otros dos dioses del imaginario mesopotámico que respaldan la importancia del vino en su civilización: Pa-gestín-dug, cuyo significado es «buena cepa»; y Nin-kasi, nombre que puede traducirse por «la dama de fruto embriagador».
2. LA BODEGA MÁS ANTIGUA DEL MUNDO ESTÁ EN ARMENIA
Data nada menos que del 4100 a.C. y es uno de los grandes descubrimientos arqueológicos relacionados con la historia del vino. Sus instalaciones están 1000 años adelantadas a las más antiguas hasta el momento en el que, en plena Guerra Fría, fue descubierta de casualidad por militares soviéticos que buscaban en la cueva un punto de defensa.
3. EL DISPUTADO ORIGEN DEL BRINDIS
Aunque para nosotros es un acto normal de celebración, todavía hoy se desconoce exactamente cómo nació el brindis. Para algunos, tiene sus orígenes en la Antigua Roma ya que este pueblo consideraba que el vino debía disfrutarse con los cinco sentidos, oído incluido. Para otros, la raíz del brindis está en la Antigua Grecia y el gesto en sí era cuestión de precaución: brindar implicaba demostrarle al invitado a nuestra mesa que la copa no estaba envenenada. Algo que despertaba muchas suspicacias cuando se brindaba con agua.
Pero a pesar de estos orígenes lejanos, muchos defienden la teoría de que el brindis tal y como lo conocemos en la actualidad se remonta a la Alemania del siglo XVI. Es más, algunos historiadores incluso dan fe del momento exacto en el que nació el brindis: en la celebración de la conquista de Roma de las tropas de Carlos V.
4. LOS VIÑEDOS ESTABAN CERCA DE MONASTERIOS Y CATEDRALES
La turbulenta historia de Europa durante la Edad Media, marcada por las múltiples guerras a lo largo de los siglos, ponía en peligro permanentemente la producción de vino. Por esta razón, solían ser los monges y religiosos los encargados de poner a salvo las cepas y sus frutos. Un gesto que no solo les permitía contar con un auto consumo de vino sino, también, con un producto con el que las órdenes religiosas comerciaban como parte de su economía de subsistencia.
5. ¿POR QUÉ EL VINO ERA TAN IMPORTANTE EN LA EDAD MEDIA?
La que ha sido una de las épocas más oscuras de la Historia lo es también por la absoluta carencia de condiciones higiénicas. Unos siglos en los que la Humanidad estuvo expuesta y mermada por la infinidad de enfermedades que, entre otros portadores, se transmitían a través del agua. Gracias al proceso de fermentación del vino, era posible poder paliar la sed sin temor a caer enfermo.
6. ¿CUÁL FUE EL PRIMER VINO DE CALIDAD QUE SE ELABORÓ?
Se le atribuye a Arnaud de Pontac, presidente del parlamento de Burdeos y propietario de un viñedo, la autoría de haber comenzado a crear vinos de calidad como respuesta a la creciente demanda de la burguesía francesa de la época. Así, en 1660 comenzó a aplicar técnicas que todavía hoy continúan vigentes, como la selección de uvas o el proceso de crianza del vino, para poder convertir sus caldos en los mejores y más caros del mercado de la época.
7. LA BODEGA MÁS GRANDE DEL MUNDO ESTÁ EN MOLDAVIA
Y no, no goza de este título de manera casual sino que forma parte del Libro Guinness de los Récords. Sus dimensiones no dejan a nadie indiferente: 250 kilómetros de túneles subterráneos, de los cuales solo se utilizan 50, en los que reposan la friolera de dos millones de botellas de vino. Fue fundada en 1969 aprovechando un antiguo trazado bajo tierra que había sido excavado en siglos anteriores.
8. LA FRASE «QUE NO TE LA DEN CON QUESO» PROCEDE DEL MUNDO DEL VINO
Seguro que alguna vez la has utilizado y, más allá de reconocer su significado, no te has parado a pensar en su origen. Es interesante descubrir que esta expresión nace en el mundo del vino. Y es que el queso era el ardid empleado por muchos antiguos bodegueros para hacer pasar sus vinos por caldos suaves y sedosos. Por esta razón, antes de comprar un determinado vino se ofrecía probarlo junto con un plato de degustación de queso que empañaba por completo el paladar y evitaba un juicio de valor objetivo.
9. EL VINO NO TIENE COLOR
¡Una afirmación que puede resultar escandalosa y, sin embargo, es absolutamente cierta! Prácticamente todos los vinos son incoloros en origen, si bien su color es fruto de la maceración del mosto de uva con la pulpa, hollejos y pepitas. Serán estos ingredientes los que, realmente, determinarán los colores y aromas finales de un vino.
10. EL MAR ES UNA BODEGA DE VINOS FANTÁSTICA
De ello dan cuenta las botellas de vino encontradas en los pecios naufragados. Una temperatura y presión constantes, la inexistencia de luz y la salinidad han demostrado ser factores ideales para el reposo del vino. Algo que ha fomentado que existan bodegas submarinas en diferentes puntos de nuestra geografía.